sábado, 29 de marzo de 2008

La Cultura en el pensamiento de Samuel Ramos

La Cultura en el pensamiento de Samuel Ramos

Miguel Angel Corral Chagolla cmf

0. Introducción.

En el presente artículo hablaremos de el hombre como ser social, es decir, de una filosofía de la cultura, para lo cual hemos escogido el pensamiento de Samuel Ramos, quien nos ayudará a descubrir la cultura mexicana, y el creador de ella como centro de dicha cultura.

Partiremos de los más general a lo más particular. Así, primero daremos una visión de la cultura a nivel general, para conocer las partes fundamentales que la integran con un análisis, y luego así, observar si dichas características se aplican al pensamiento de Samuel Ramos.

1. Breve semblanza de Samuel Ramos.

Un 8 de Junio de 1897 nace un gran pensador mexicano en Zitácuaro, Michoacán, uno de los estados más bellos de nuestro país. Sus estudios los realizó en el Colegio de San Nicolás de Hidalgo en la Ciudad de Morelia, y en 1915 en la Ciudad de México comenzó los estudios de medicina, dejándolos más tarde por los filosóficos bajo la guía de Antonio Caso.

Su pensamiento lo podemos dividir en dos grandes etapas: la primera se caracteriza por ser predominantemente crítica, teniendo como punto de arranque la duda metódica (1) pues la filosofía no es algo ya hecho; la segunda etapa de su pensamiento es ya una actitud constructiva donde se preocupa por los problemas de una antropología cultural y la filosofía del arte.

2. Marco histórico del término cultura.

Desde la "cultura antropológica" en un sentido subjetivo se entiende la cultura como "la formación del hombre, su mejoramiento y perfeccionamiento" y desde el punto de vista de la "antropología cultural" se entiende como "el conjunto de productos y valores de un grupo humano" (2).

Esto dicho de una manera global es la definición que nos presentan los diccionarios de filosofía, pero a través de los tiempos se ha entendido de muchas y diversas formas. Así en la EDAD ANTIGUA era entendida como "paideia", es decir, la búsqueda y realización de la verdadera naturaleza humana; Platón la entendía como "educación" pues es la dirección que conduce al alma del niño al amor, y de ella depende que se alcance el ideal de la comunidad social (3).

En la EDAD MEDIA la cultura ya no era entendida como educación sino como "disciplina". Santo Tomás hace su filosofía de la cultura en sentido pedagógico tomando el sentido de disciplina que se le daba a la cultura. Ya en la EDAD MODERNA con el "Renacimiento" se entiende la cultura como "la formación del hombre en su mundo, es decir, la formación que permite al hombre vivir del modo mejor y más perfecto en el mundo". Se mantiene el sentido de "sabiduría", y como tal está reservada a unos cuantos.

El primer intento para eliminar el carácter aristocrático de la cultura fue con la "Ilustración" donde se entendía como instrumento de renovación de la vida social e individual, no patrimonio de los doctos. Surge en este tiempo Herder quien afirma que sin cultura el hombre no se realiza jamás a sí mismo, y Wundt que es el primero en ocuparse en la etimología del término.

No podemos olvidarnos de la EDAD CONTEMPORANEA que está llena de grandes hombres como Casirer, Spengler, Scheler y Ortega y Gasset. Este último afirma que la cultura es la "actividad personalísima y consciente" (4), "no es la vida toda, sino sólo el momento de seguridad, de fuerza, de claridad" (5), por esto "la cultura tiene que ser vital", es "un sistema de actitudes ante la vida que tenga sentido, coherencia, eficacia" (6).

En conclusión, la persona alcanza un nivel de vida plenamente humano mediante la cultura, por esto, ella debe de promover la dignidad humana, eduque para la contemplación, para la personalidad, para la religiosidad, aunque escuchemos aquella frase de Ludwig Feuerbach:

"El verdadero cristiano no siente necesidad de la cultura, porque ésta es un principio mundano, contrario al sentimiento (religioso)... Dios le sustituye la necesidad de la cultura"(7).

3. La Cultura en Samuel Ramos.

Empecemos hablando por las "influencias filosóficas" que tuvo Ramos en su pensamiento, después de haber analizado muy brevemente el pensamiento acerca de la cultura a través de la historia. Y del primero que debemos de hablar es de Antonio Caso pues él fue quien promovió su vocación por la filosofía, aunque se separa Ramos de él, al ver que su pensamiento no evoluciona. Vino entonces José Vasconcelos quien le inyectó en su espíritu inquietudes nuevas; los libros de la "Raza cósmica" e "Indología" despertaron su interés por la filosofía de la cultura mexicana.

A Henríquez Ureña debe gran parte de su estilo como escritor, y leyendo a Ortega y Gasset descubre que toda concepción del mundo no es más que la perspectiva desde el cual se mira, y aprovecha el perspectivismo para elaborar la filosofía de la cultura mexicana.

El "pensamiento" de Ramos acerca de la CULTURA MEXICANA parte de dos preguntas: ¿Cómo es la cultura mexicana (en el supuesto de que exista)? ¿cómo sería dicha cultura? (8). Así rechaza la idea de la cultura por mera imitación y se afirma en la idea de una cultura por asimilación y una cultura criolla. Con esto surgen varios conceptos: la cultura derivada por imitación o mimetismo mexicano, la cultura de primera mano o el mexicanismo puro y la cultura derivada por asimilación o cultura criolla.

Es importante considerar que toda cultura se forma de acuerdo a los hombres que la conforman, porque por su propia naturaleza el hombre es un ser cultural (9). Por esto para Samuel Ramos es importante el FILOSOFAR DE LO MEXICANO, pues el destino de nuestra cultura depende del conocimiento del hombre mexicano, por lo mismo es preciso saber las condiciones espirituales de los mexicanos que han de crear esa cultura.

Ramos enlaza su filosofía de la cultura con el filosofar sobre lo mexicano. Así examina al hombre mexicano, clasificándolo en: el pelado, el mexicano de la ciudad y el burgués mexicano. El "perfil mexicano" elaborado por el Dr. Ramos solo clasífica los errores más no las cualidades.

El "perfil" viciado del mexicano actual conduce el filosofar de Ramos a una nueva cuestión: ¿cómo liberar al mexicano de su falso carácter? ¿cómo purificar su alma de esas anomalías psíquicas? Así comienza con su filosofar acerca de el NUEVO HUMANISMO que llevará al mexicano a una total armonía de su ser, formando así una cultura mexicana propia; el punto de partida fué la falta de armonía del hombre con el mundo y su tarea será levantar al hombre de su estado de animalidad para colocarlo en el sitio de humanidad justo.

4. Conclusión.

Después de haber realizado un recorrido a través de la Filosofía de la Cultura, nos hemos encontrado que existen distintas definiciones de "cultura" y una de ellas que encierra en sí las partes fundamentales de toda cultura:

"La cultura es la transformación de las cosas y de la propia actividad y ser personal para impregnarlos con los fines y valores propios del espíritu: es una penetración transformadora del espíritu humano en las cosas y en la propia actividad de la persona" (10).

Esta definición se puede aplicar a todas las culturas, entre ellas la mexicana, de la cual se encarga nuestro autor en algunas de sus obras, en especial "El perfil del hombre y la cultura en México".

La Cultura Mexicana es definida, por Samuel Ramos, desde el primer momento por su carácter más aparente, como una "cultura derivada", desde la Independencia por vía de "imitación". Pero como existía un elemento indígena en el pueblo, la cultura mexicana es una "cultura miscelánea" cuya manifestación más valiosa es la cultura "criolla".

Ramos es el primero en adentrarse a la investigación realmente seria verdaderamente científica y filosófica sobre lo mexicano. Por eso lo podemos considerar como filósofo de la cultura.

  1. Puesto que el apreciaba aquel pensamiento de Aristóteles que afirma que "la duda es el principio de la sabiduría".

  2. ABBAGNANO N., Cultura, en Diccionario de Filosofía, F.C.E. México 1991, p.272.

  3. PLATON, Leyes I, 643.

  4. ORTEGA Y GASSET, Nueva Revista, 1910, p. 145.

  5. Ibid. Meditaciones del Quijote, 1914, p.356.

  6. Ibid. Teoría de Andalucía, 1942, p.113.

  7. FEUERBACH Ludwig, La esencia del cristianismo, Buenos Aires, Claridad, 1963 (2ª ed.).

  8. RAMOS Samuel, Obras Completas, T.1, El perfil del hombre y la cultura en México, p.96.

  9. DERISI Octavio, La persona y su mundo, en Sapientia 1992, Vol. XLVII, Ed. Facultad de Filosofía y Letras UCA, p.83-84.

  10. CORETH Emerich, ¿Qué es el hombre? Esquema de una antropología filosófica, Ed. Herder, Barcelona 1976, p.85.

http://www.gratisweb.com/kyrios_cmf/f-ramos.htm

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